Hace unos días, nuestras amigas de Geodogs on Road nos nominaron a los Liebster Awards. ¡¿Pero qué es esto?! Tuvimos que ir a mirar y resulta que son unos premios que se hacen entre blogs pequeños (menos de 200 seguidores), de una bloguera a otra, para darles más visibilidad. Tiene algunas reglas:
- Debes tener al menos un Liebster para poder nominar a otros blogs. Podrás nominar a 5, 11 o 20 blogs.
- Cuando has sido nominado, debes seguir al blog que te otorgó esta nominación.
- Hay que visitar a los otros blogs nominados y si te gustan seguirlos.
- Una vez has sido nominado, tendrás que responder a las 11 preguntas que te han formulado, hacer tus nominaciones y ya habrás ganado el premio Liebster Awards.
Como Ligrones en Ruta somos dos, David y yo (Carla), Roberto y Greta no responderán esta vez, cada uno dará sus respuestas, ya que son diferentes para ambos. Así que aquí van estas respuestas para que nos conozcan un poco más, y al final de la entrada encontrarás a nuestros nominados!!:
1. ¿Cuál ha sido el viaje de tu vida, el que más te ha marcado?
CARLA: El viaje de mi vida sin duda, es el año que pasé en Suecia. Un año entero en un país diferente, con un clima tan opuesto al de Canarias, y una manera de vivir tan marcada por esa climatología. Además, de ser la primera vez viviendo fuera del nido en el que crecí, sin la familia. Tiene que ser ese viaje. Tuvo que ser ese viaje para mí.
DAVID: el viaje lo inicié con 22 años, solo y el destino fue Irlanda. Durante 6 meses viví en ese maravilloso país, exploré muchos rincones y conocí a sus gentes. Me costó poco adaptarme y el enfrentarme a la vida en todos sus aspectos en un lugar que no conocía, me hizo crecer enormemente y valorar muchas cosas importantes.
2. ¿Y uno que haya sido un desastre o que no salieran las cosas como pensabas?
CARLA: La verdad es que, en un viaje siempre hay percances, cosas que fallan, faltan, se tuercen, otras que no suceden, y muchas otras que sí, pero siempre se sale del paso, se buscan soluciones y es parte del viaje, de la vida. Creo que depende mucho de la manera en que uno encara la vida, las repuestas que pueden darse a esta pregunta. Pero si tuviera que decir algo… (venga voy a mojarme), algo que no salió como esperaba: Antes de llegar a Suecia yo iba a pasar un mes en Berlín. Allí me esperaba un chico que conocí en Tenerife y que estuvimos enrollados unos meses y del que estaba súper enamorada. Yo tenía mi billete para Berlín desde Tenerife, pero luego resultó que él estaba trabajando en Dinamarca recogiendo fresas mientras vivía acampado en la Ciudad libre de Christiania. Así que desde Berlín (tras dejar parte de mi equipaje para 1 año en Suecia en casa del hermano del chico en cuestión) cogí, ya no recuerdo ni cuantos transportes, pero si recuerdo ir en una guagua que luego se subió a un barco y que luego volví a montar en la guagua y finalmente llegué, para descubrir que el chico, se había enamorado de otra persona. Así que me vi sola en una tienda de campaña, acampada en Christiania. Nada más salir del nido, el palo de la vida, ja, ja, ja, pero sobreviví. Estuve allí 10 días, conocí a mucha gente y crecí, siempre se crece. Luego me saqué un billete de tren a Utrecht, donde un amigo mío acababa de llegar para hacer el doctorado y pasé con él las otras tres semanas que me quedaban antes de que mi avión a Suecia saliera desde Berlín.
DAVID: en realidad nunca me he llevado una decepción en un viaje porque casi siempre dejé en casa las expectativas para dejarme sorprender. Tan solo recuerdo en unas vacaciones en mi querida Huelva, levantarnos muy tempranos una mañana de verano para ir a ver el despertar de las aves en una marisma cerca de El Portil. Antes de salir de Huelva el coche nos dejó tirados y tuvimos que volver a coger el otro coche. Al llegar a la marisma, una de las ventanillas traseras se atasca y al intentar subirla forzándola el cristal estalló en miles de trocitos. Aun así, llegamos a tiempo antes de la salida del sol.
3. Te entrego un billete con destino en blanco… ¿A dónde te irías mañana mismo? Te dejo elegir más de uno…
CARLA: Iría a donde mismo estoy ahora. Estamos andando hacia donde queremos. Lo que me impide viajar a donde quiera en este momento, no es la economía, son nuestras propias elecciones y decisiones con nuestras circunstancias actuales. Podría decirte venga, mañana me voy a África, pero ¿y luego qué? Nosotras queremos viajar a África y vivir allí unos meses para convertirnos en parte de la sabana, y luego viajar al sudeste asiático y quedarnos a conocer, para luego cruzar el Atlántico y convivir con las de aquel lado y después ir a la Antártida y hacer kayak. Ese es el billete que nosotras queremos, je, je, je. ¿Tú también, no? ,ja,ja,ja.
DAVID: Lo cierto es que ese billete ya lo tenemos y suscribo las palabras de Carla.
4. ¿Te importaría viajar sola si no tuvieras con quien hacerlo? (A lo mejor lo prefieres así)
CARLA: No me importa viajar sola. Ahora mismo lo pienso y sería como ir súper ligera, vamos entonces sí que me iría a África mañana mismo, ja, ja, ja. Pero somos un equipo de 4 y entre todos planeamos la estrategia.
DAVID: nunca me importó viajar solo, lo hice mucho, pero ahora prefiero hacerlo en familia. Es muuuucho más divertido.
5. ¿Te atrae más la naturaleza o la ciudad? ¿Una combinación de ambas? ¿Depende del día?
CARLA: La Naturaleza. La naturaleza es de lo que nos hemos alejado, construyendo nuestras ciudades de asfalto, tuberías, cañerías y cables. Oye, que vivo muy bien ahora mismo en mi casita ¿eh? Por eso quiero visitar esos lugares en los que la Naturaleza no ha sido quebrada, donde es inmensa y grandiosa, hasta el punto de ser agresiva. Eso, a la vez que me eleva la cabeza segregando hormonas de esas guays, me pone los pies pesados en el suelo recordándome que tan solo soy una humana.
DAVID: sin ninguna duda la naturaleza. Me crie y aprendí impregnado en ella. Las ciudades tienen cosas muy interesantes y preciosas, pero hay demasiada gente allí je, je, je.
6. ¿Algún destino que te haya decepcionado o que no cumpliera tus expectativas? ¿Y otro al que te tuvieron que convencer para ir y del que volviste encantada?
CARLA: La verdad es que si algún viaje me decepcionó no lo recuerdo. Me adapto al momento. Tengo ese tipo de carácter que, sí, lloro un poquito y en voz alta, pero “ale” ya está, ahora veamos qué hacer. No recuerdo que me hayan tenido que convencer para hacer algún viaje. Suelo hacerme responsable de las decisiones que tomo, que te convenzan es como poner toda la responsabilidad en el otro, ¿no?
DAVID: no recuerdo ninguna decepción y como dije antes nunca llevo expectativas, me gusta sorprenderme con lo que me encuentro. ¿Convencerme? No hace falta me apunto a lo que sea. Lo cierto es que vuelvo encantado de cada viaje, porque voy dispuesto a embriagarme de todo lo que tiene que ofrecerme.
7. ¿Dónde te has encontrado a la gente más hospitalaria? ¿Y a la menos acogedora o más sería?
CARLA: Pues en general siempre me he encontrado con buena gente, creo que la gran mayoría de las veces en función de cómo entres tú, obtienes la respuesta de la gente. Sí puedo decir que, en china, la gente es muy cercana, claro son tantos que están muy apretados, ja, ja, ja, no en serio, allí el espacio vital de cada uno es mucho menor que en España, es decir, llega una persona y se te coloca a 20 cm, allí es normal. Y aunque no entiendas ni papa se quieren comunicar contigo y ayudarte. En Suecia, en general, la gente es muy amable, pero ahí se queda. Tienen una esfera de amabilidad y buen comportamiento y es difícil atravesarla y ser más personal. Pero va con la cultura, ¿no?, en España nos besamos al conocer a alguien, allí eso es “muy latino”, el saludo es con la mano. Temas culturales…
DAVID: Con los años me doy cuenta que las personas más hospitalarias son las más humildes. En Eslovaquia conocí a varias familias que me acogieron sin casi conocerme. Hasta una de las madres descolgó de sus paredes artesanía de la localidad que había hecho, para que me la llevase de recuerdo. Para mí, con 23 años que tenía, aquello me pareció chocante y lo viví con intensidad. Gentes con pocos recursos que ofrecían lo poco que tenían. Me llegó muy adentro. Las gentes más distantes las he conocido casi siempre en grandes ciudades, donde me he sentido despreciado por no saber hablar bien el idioma local. Me viene a la cabeza una ocasión caminando por Londres en dirección a la estación Victoria, paré a un perfecto inglés y le pregunté amablemente si creía que iba en la dirección correcta, no pudo más que arrugar la nariz, cerrar los ojos y poner una expresión de desagrado para continuar su camino sin decirme una palabra. Quizás fue algo aislado pues 3 horas después estaba en un pub rockero en Worthing donde compartí una velada sensacional con otros ingleses que no conocía.
8. ¿Cuál ha sido el objeto más extraño que te has traído de un viaje?
CARLA: Pues de China me traje un trozo de teja. Los tejados de los templos de los Montes Wudang (Patrimonio mundial de la UNESCO 1994), tienen una tejas de color verde precioso. Pero cuando se rompen y se ponen nuevas, ya no son del mismo color, ¡¡no consiguen hacerlo igual!! Un día encontramos trozos de tejas tirados en el suelo, en un lugar que estaban arreglando, y me llevé uno, supongo que antiguo porque era de los que iban a tirar…
DAVID: La pluma de un arrendajo azul encontrada en la sierra Onubense. La he tenido por más de 20 años y en la última mudanza desapareció. El significado: fue mi hermana Esther quien me dijo a qué pájaro pertenecía y al mirarla siempre me recordaba lo mucho que nos queremos y lo bien que estábamos juntos a pesar de vivir alejados.
9. ¿Sueles escribir en el blog o en un diario mientras viajas? ¿O prefieres saborearlo y recrearte a la vuelta?
CARLA: Desde siempre, cuando viajaba con mis padres de pequeña, iba con una libreta y un boli en la mano. Redactando todo lo que nos pasaba. Recuerdo en Italia, en los Apeninos, subiendo al Gran Sasso, yo con 10 años iba delante. Me adelantaba de mis padres y hermana para sentarme y escribir lo que íbamos viendo, cómo estaba de cansada, etc, ja,ja,ja, al llegar a casa lo pasé a limpio y mi madre lo guarda en casa de recuerdo con mucho cariño (en la foto puede verse junto con el álbum de fotos de esa ascención). Mi primer blog, desde mis ojos Sweden, nace en mi año en Suecia en 2007, donde contaba mis experiencias. Y ahora este, de Ligrones en ruta, ¡¡porque hay muchas cosas que contar!!
DAVID: En realidad ya no suelo escribir durante los viajes, me quedo con las vivencias. Con 16 años comencé a plasmar en folios sueltos y luego libretas desde lo que acontecía en mi cabeza y a mí alrededor, los poemas que me han llegado incluso los que me nacían. Hace unos años abrí un blog con ninguna pretensión la verdad, pero sí la de continuar escribiendo en otro formato. En la actualidad Ligrones en Ruta ocupa gran parte de mi escritura. En general suelo escribir en el momento si la oportunidad lo propicia para no perder la esencia y que no se vuelva inefable.
10. ¿Te has encontrado en alguna situación de peligro durante un viaje? ¿Y en alguna especialmente cómica?
CARLA: Ahora mismo no recuerdo haber estado en situaciones en las que mi vida corriera peligro o yo ser consciente de correrlo. Sentí miedo en Christiania, durmiendo en mi tienda de campaña y escuchar a alguien gritar mucho mucho, pero era una persona que iba colocada, seguro. Pasé un poco de miedo en Edimburgo, donde fui a un congreso, volviendo sola de noche a mi alojamiento low cost, con mi barriga de embarazada de 4 meses. Fue la pancha, el bebé, lo que me hizo pensar, que ya no era yo sola… pero vamos eso me podía haber pasado en cualquier lugar. Situaciones cómicas…. Mi vida es una comedia! ,ja,ja,ja.
DAVID: No recuerdo sensación de peligro en ningún viaje, sin embargo, temí algo por mi vida una noche de enero a -18°C en Eslovaquia. Situación: un amigo y yo bastante borrachos de Borovička. Con casi 200 kg entre los dos, sentados en un trineo de madera para niños al principio de una calle en cuesta, con la única luz que iluminaba la calle sobre nosotros y el resto negro absoluto. Tuve que confiar en mi amigo pues no sabía a dónde íbamos a parar calle abajo. Afortunadamente nos estampamos en un gran montículo de nieve muy blandita de 2 metros de alto.
11. ¿Un crucero, un tren de lujo, una autocaravana o comer kilómetro con un coche?
CARLA: Me adapto a lo que sea, incluso mochila y a caminar, que no lo han puesto, je, je, je.
DAVID: Cualquier cosa me sirve si me lleva hasta donde quiero, incluso caminando. Por preferir prefiero el lento rodar de vivir en furgoneta, pero caminar con una mochila a la espalda en medio de la naturaleza también me satisface enormemente.
Y hasta aquí nuestras repuestas!!! Ya hemos ganado nuestro primer Liebster yupiiiii.
Ahora le toca responder a nuestros 5 nomidados para los Liebster Awards que son:
Si les apetece, animamos a estos cinco blogs a responder a las mismas preguntas!!
Hola!!
Me ha encantado leer vuestras respuestas 🙂
Realmente viajar te llena de experiencias y te ayuda a crecer ¡Qué pasada vivir un año en Suecia! Veo que compartimos el amor por la Naturaleza, a mi también me gustan los lugares con naturaleza extrema, salvajes.
A seguir disfrutando y viviendo intensamente! Un abrazo!
Gracias Txell, por leer y comentar. Nos seguimos leyendo y a ver si un día nos cruzamos y nos ponemos cara. Un besito!!